CÓMO ENSEÑAR A LOS NIÑOS A CUIDAR EL HOGAR

19 diciembre, 2018

Los niños tienen una capacidad asombrosa de aprendizaje. No es un secreto que sean más perspicaces, creativos e indagadores que nosotros los adultos. De hecho, es en la infancia en que más conocimientos se pueden meter en ese pequeño cerebro. ¡No sabemos cómo cabe tanto! Por ello, no sólo conocimientos sino también valores y hábitos deben enseñarse. En este artículo hablaremos sobre algunos consejos para enseñar a los niños a cuidar las cocinas de granito, y el hogar en general.

No importa si su casa es grande o pequeña, si tiene muchas habitaciones o sólo una, de hecho no importa si es un departamento con vista al mar, o bien, en el corazón de la ciudad. No hay sitio más oportuno que enseñar hábitos y valores, que el sitio donde se crece. Es el hogar donde comienza la sociedad, donde los adultos de mañana tienen que aprender hoy cómo comportarse y cómo ser útiles y felices en la vida.

Un guía, ya sea un padre, madre, tío, abuelo o hermano mayor, incluso, puede ayudar al pequeño a discernir el bien del mal, formar a un adulto responsable. Por eso es indispensable que cuando se enseñe, se predique con el ejemplo. Así es, la frase que tanto conocemos es famosa porque es muy acertada.

¿Cómo enseñar a los niños a cuidar el hogar?

Antes que nada, si tienes hijos y son pequeños, deberás acondicionar tu casa a prueba de ellos. Esto es, tapando los enchufes, redondeando las esquinas de las mesas, utilizando el granito en las superficies como en los baños y cocinas de granito, para evitar manchas que se peguen por siempre, tapando el paso a escaleras, no dejar objetos atractivos como juguetes en los estantes altos. Todo ello para evitar accidentes.

Por lo regular, la gente se olvida de todo esto porque para ellos, la lógica indica no acercarse a los lugares peligrosos. Pero los niños no saben que son peligrosos hasta que lo experimentan. Y un regaño no basta, una preventiva tampoco. Lo más aconsejable es alejar todos estos riesgos de ellos.

Una parte importante de mantener tu hogar limpio y agradable, es evitando los accidentes que te comentamos.

En segundo lugar, recuerda siempre llevar a cabo lo que has dicho. Sobre todo con los niños más grandes, puesto que ellos no sólo se rebelarán ante ti sino que exigirán que cumplas tú también. Como hemos dicho, los niños son muy inteligentes. Aplica a su lógica en lugar de decir “porque soy tu padre y lo ordeno”, y verás cómo su comprensión los llevará a obedecer las reglas.

Pues bien, por allí debes comenzar. Explica por qué estas reglas son tan importantes: establecen orden, ayudan a mantener el hogar limpio, cómodo y bello. Además, son tan naturales de seguir porque en todos lados existen: en la escuela, en el hospital, en la plaza, hasta en los juegos hay reglas. Son una parte importante de la convivencia y existencia de la sociedad. Es allí donde nos diferenciamos de los animales. Nosotros podemos razonar y establecer medidas que mejoren nuestra vida.

Recuérdales que no se trata de limpiar, limpiar, limpiar, sino de no ensuciar la casa. Con esto nos referimos a que es más sencillo recoger los juguetes después de jugar, que recoger los juguetes, los tapetes, los libros, las cobijas y los peluches dos días después de que ya jugaron. Así no se acumulan las tareas, no se pierde tanto el tiempo y es menos esfuerzo. Diles que aplica para todas las habitaciones del hogar. Si utilizas un vaso de plástico para beber agua, después de haberlo utilizado, regrésalo al lavabo (aunque no lo laves, por ejemplo).

Establece tareas para cada uno. Aunque no lo creas, niños de tres y cuatro años ya pueden ayudarte con el quehacer. Dependiendo de la edad, los niños pueden desarrollar tareas sencillas, o un poco más complicadas. Si todos en la familia llevan a cabo su parte, no es necesario que tú solo te esfuerces al doble o al triple y gastes toda tu energía en ello. Si quieres saber qué tareas son ideales para cada edad, te recomendamos que busques en internet. Allí encontrarás más detalles.

Pide su opinión respecto a la decoración y decisiones importantes. Cuando elijas el nuevo color para la pared, pregunta si le gusta. Cuando pienses en cambiar los muebles, lleva a tu hijo a la mueblería para que también opine. Sobre todo si vas a remodelar las habitaciones de tus hijos ¡no olvides tomar en cuenta sus gustos! Inclusive si sabes que no es la mejor decisión, permite que de vez en cuando aplique en la decoración lo que él o ella considera que luce bien. Así, con más ganas querrá conservar su hogar bello y cómodo.

Enseña la manera correcta de limpiar. Aunque los niños aprenden rápido, si es necesario, repite muchas veces el procedimiento. No regañes si lo hacen mal, sólo vuelve a explicarlo. Felicita cuando lo hagan bien, incluso aunque la tarea sea sencilla. Por ejemplo, las cocinas de granito tienen la característica de que se ensucian menos gracias a la superficie de granito que permite que se resbalen los líquidos y sólo con un pañuelo se limpien. No tiene mayor ciencia, y sin embargo, cuando tu hijo pase bien el pañuelo sobre la cubierta, agradece y felicita. Aumentará su autoestima y sentirá que hace algo útil, lo cual lo incita a repetirlo.